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La filigrana musical de Ofilio Picón

29 enero, 2017

Mario Urtecho

– Con plena seguridad puedo aseverar que, si el maestro Ofilio Picón no hubiera musicalizado La Bala, ese bellísimo poema de nuestro Salomón de la Selva nunca hubiera sido tan conocido por adolescentes, jóvenes y adultos de Nicaragua y otros países como lo es ahora. Así se constata en cada concierto de Ofilio, donde el auditorio pide que lo interprete y con auténtico entusiasmo, unen sus voces a la suya y cantan y vibran entonando cada uno de sus versos.


Ofilio Picón

Y eso es así porque Ofilio tiene la capacidad y el oído virtuoso para detectar e identificar melodías, ritmos, armonías y consonancias con que los poetas han engalanado las palabras convertidas en versos. En eso estriba la magia de Ofilio Picón. Él aprehende los sentimientos que le trasmiten los poemas y los convierte en ritmo, música y canción.

Y ese prodigio sólo es posible crearlo si el músico también es poeta. Y Ofilio lo es. De otra manera no podría hacer lo que hace. Con la reciente presentación del disco La libertad y el mar son una música, su quinto disco, ratificó su incuestionable calidad artística. En ese trabajo musicalizó doce poemas del poeta catalán Santiago Montobbio que, acompañado por consagrados músicos del solar, como Pancho Cedeño, Raúl Martínez, Jefrey Rubens, Ronald Hernández, Miguel Ángel Oviedo, Erick Hernández, sus hijos Arleny y Camilo, y el colombiano Álvaro Rodríguez, es un gozo para el espíritu y el oído, como lo deleitamos quienes abarrotamos el auditorio del Instituto Nicaragüense de Cultura Hispánica (INCH), y lo ratificó desde Barcelona el poeta Montobbio.

No recuerdo dónde leí, que un niño entró al taller de un escultor, que cincel y martillo en mano sacaba de un bloque la cabeza de un caballo. Sorprendido, el niño preguntó al artista cómo supo que el caballo estaba escondido dentro de la piedra. Una pregunta parecida le hice a Ofilio: – ¿Cómo supiste qué música ponerle a cada poema? Me respondió que después de un tiempo de haberlo leído es el poema quien le sugiere la entonación y la música. Pero crearla no es fácil ni sencillo. Allí inicia el proceso, hasta lograr que la música se sostenga sin esfuerzo en el aire de la memoria. Y los ritmos que Ofilio utiliza y musicaliza son los que en esta parte del mundo oímos, gozamos, y a veces sufrimos: boleros, bachatas, sones, danzones, en los que los versos se acomodan, y nos hacen cantarlos, bailarlos y sentirlos.

Este cantautor, y médico de profesión nunca ejercida, porque desde muchacho quedó atrapado en las redes del arte, además de ponerle ritmo a sus creaciones, también ha musicalizado con guitarras, pianos, bajos, contrabajos, percusión latina, violines, flautas, melódicas, charangos, zampoñas, a casi todos los poetas nicaragüenses, incluidos: Rubén Darío, Alfonso Cortés, Carlos Martínez Rivas, Ernesto Mejía Sánchez, Pablo Antonio Cuadra, Edwin Castro Rodríguez, Humberto Avilés y otros. Asimismo, hizo Mujeres con guitarra, donde canta poemas de Claribel Alegría, Ana Ilce Gómez, Daisy Zamora, Gioconda Belli, Blanca Castellón, Suad Marcos, Milagros Terán, Rosario Murillo, Isolda Hurtado y Marta Leonor González.

Ofilio pertenece a ese selecto grupo de artistas que, como Carlos y Luis Enrique Mejía Godoy, han unido música y poesía, posibilitando conocerlas y disfrutarlas. Su arte engrandece a Nicaragua.* (*Publicado el 14 11 2016 en Revue d´Art et de Littérature, Musique –Espaces d´auteurs)

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Diriamba, Nicaragua, 1954.
Autor de Voces en la Distancia, ¡Los de Diriamba!, Clarividencias, Los nicaraguas en la conquista del Perú, Mala Casta, La mujer del padre Prado y otros cuentos y 200 años en veremos. Editó la Revista Literaria El Hilo Azul y ha revisado obras de prestigiados novelistas, cuentistas, poetas, y ensayistas, incluidas la antología Pájaros encendidos de Claribel Alegría y la poesía completa de Leonel Rugama y Ernesto Cardenal. Cuentos, ensayos y artículos suyos han sido publicados en diarios nicaragüenses y de otros países y en la Antología del Cuento Nicaragüense de Fernando Silva, Revista y Antología de la Academia Nicaragüense de la Lengua, Revista Cultural Centroamericana Carátula, Editorial Alfaguara, Revista Cultural El Golem, México, L ́Ordinaire Latino-américain (Toulouse, Francia), Editorial Nuevo Ser (Argentina) y Memoria del Encuentro Internacional Rubén Darío en el centenario de su muerte.