Conversaciones sobre Poesía Reunida de Amparo Dávila
23 noviembre, 2014
Juan Galván Paulin
Amparo Dávila* es una escritora mexicana dueña de una obra elogiada por Cortázar, con quien cultivó profunda amistad, lo mismo que con la poeta Alejandra Pizarnik, pero un tanto olvidada por el público. Cuentista de pura cepa, en sus narraciones expone un tono cuyas resonancias están vinculadas con el tiempo, con la locura. Inicialmente escribió poesía, y es en ese terreno que Juan Galván Paulin explora vehementemente, tal como lo muestra en este breve aunque intenso texto.
…de Amparo Dávila (Pinos, Zacatecas, 1928) conocemos sus cuentos en Tiempo Destrozado, Música concreta y Árboles petrificados; una obra abocada a revelar la realidad otra, no la onírica ni la compulsión psíquica de una hybris fantástica, por el contrario, una alteridad que, por simultánea en su presencia a través del lenguaje, como ya lo dije en otra ocasión, hemos preferido clasificar como literatura antes que la posibilidad especular de nuestras más ocultas y profundas realidades personales: los textos narrativos de Amparo son el escándalo de la encarnación del miedo en personajes o bestias o seres híbridos de la demencia y la lucidez, ante una realidad que cada vez se nos desdibuja más a fuerza de ignorarla o suplantar su densidad con los artificios de lo virtual; encarnación también de los deseos de toda índole, nunca disfrazados del todo y siempre victoriosos por gracia de nuestra condición humana; una literatura del límite, dirán; prefiero llamarla religiosa, en su sentido de comunión con los abismos del ser, con la sobrenaturaleza implacable de la transmutación poética… al inicio de este texto dije “conocemos”; año con año somos menos quienes nos acercamos a las obras de nuestros altos autores, y está de más recordar las causas, son lugar común y amnesia progresiva… y si esto acontece con la narrativa de Amparo Dávila ¿qué decir de su casi secreta poesía bordada a lo largo de su vida?… casi secreta pues además de íntima es intimista, jugando con las homofonías, en su belleza de aparente serenidad, intimidante, con el agudo filo de una navaja capaz de abrirnos para dejar a la intemperie el alma, esa conciencia de nosotros también insospechada… ¿qué hacer con esos poemas precisos cuya estructura y sonoridad nos mantienen en vilo conforme los versos se decantan como una gota de agua al borde de un precipicio, de la que esperamos, más que ansiosos, famélicos hasta que cae? así el poema se resuelve en resonancia sentenciosa para llenarnos de su gracia, y nos parece irrevocable… así en el poema Angustia de Salmos bajo la luna (1950): “Quién llegará hasta la profundidad sin fondo?/ Quién sabe del tormento de las almas?/ Ahí donde acaban los sonidos y la tonalidad se agrava;/ ahí donde el dolor triunfante se pierde en los abismos/ del silencio… poesía en consonancia con su narrativa, que no he leído como embrión o espejo de las atmósferas y las anécdotas de sus relatos, de una asfixia de la conciencia que encara los riesgos de la voluntad, la decisión de que nuestra cordura se ve obligada a tomar ante la amenaza del instante inmediato al presente, sino como un corpus poético en sí mismo, el lenguaje posible para ir más allá de lo que en ocasiones puede significarnos el “límite”, si esto es posible, de la prosa: “Me iré sencillamente/ por calles/ viento/ mares/ es igual para irse/ cuando el cuerpo/ ya no es cuerpo/ y decir no dice nada.” (de El Cuerpo y la Noche); lucidez de la sabiduría poética o sabiduría de la lucidez poética que en ocho versos expresa la verdad humana, y no el pesimismo ante la muerte, la Nada, sino en una reconciliación con la soledad y el destino; y lo mismo con el amor, con el largo intervalo de la ausencia que es donde mejor se manifiesta: “Callas…/ en vano espero recostada/ a la orilla de la tarde,/ tu voz no rompe el cristal/ ni tu sombra camina entre mis manos./Huésped del silencio,/ de tanto esperar/ me he tornado flor/ de sombra y hueco.” (Meditaciones sobre un tema de ausencia; Meditaciones a la Orilla del Sueño (1954)… síntesis de la vida transcurrida y del anhelo siempre en devenir, angustia ante el presente es el padecimiento del poeta y al mismo tiempo la redención –resurrección, diría Lezama Lima- por la palabra: una manera de habitar la realidad en la atemporalidad –si por ésta entendemos la eucaristía del pasado, el presente y el futuro- para hacer del instante eternidad, el sagrado tiempo de lo cotidiano: “Entonces el hombre sabe/ que sólo tiene por futuro/ fríos cadáveres de astros/ y sueños rotos./ Transido de pasado ha de vivir/ la muerte del propio olvido.” (Tránsito del olvido; Perfil de soledades (1954)… la austeridad de los poemas de Amparo Dávila es su precisión para nombrar de una vez y para siempre aquella realidad por la que transita, ésta en la que nos encontramos inmersos, acaso sonámbulos; y su sonoridad es tan contundente como el tañido de las campanas de una iglesia, sea en un pueblo desolado, sea en un barrio anónimo de la ciudad: siempre se escucha por encima de cualquier silencio, de cualquier olvido… y con esto la certidumbre incontestable de que la existencia es vivida con la inseparable unidad de lo que somos, cuerpo sensual y alma gestante del deseo: “El cuerpo busca en la noche/ la fugaz duración del sueño/ la leve permanencia de su gozo/ y la huella tal vez/ de una mirada/ instante consumado/ y sin retorno.” (de El Cuerpo y la Noche)… y si bien el conocimiento de la obra puede entenderse como una totalidad si sólo accedemos a su prosa, desde la aparición en 2011 de su Poesía Reunida la expedición a su universo se hace más amplia, inquietante por los territorios del alma que muestra, que erosiona…
* Amparo Dávila Nació el año de 1928 en Pinos Altos, población del norteño estado de Zacatecas de la república mexicana. Poeta y narradora. Desde temprana edad se mudó a San Luis Potosí en donde cursó estudios de primaria y secundaria. Vivió desde 1955 en México, Distrito Federal para continuar sus estudios universitarios, ahí trabajó como secretaria del escritor Alfonso Reyes, además de ser miembro del Centro Mexicano de Escritores. Ha colaborado en Estilo de San Luis Potosí; Ariel de Guadalajara; y en las revistas Mexicana de literatura, de Bellas Artes y de la UNAM. Recibió el Premio Xavier Villaurrutia 1977.
Bibliografía: Poesía: Salmos bajo la luna (1950); Meditaciones a la orilla del sueño (1954); Perfil de soledades (1954). Cuentos: Tiempo destrozado (1959); Música concreta (1964); Árboles petrificados (1977); Muerte en el bosque (1985); Cuentos reunidos (2009); Alta cocina; El huésped.
Nació en la ciudad de México, octubre 9 de 1955. Poeta, narrador y ensayista. Cursó estudios en la UNAM: Sociología, Ingeniería Agrícola, Lengua y Literatura Hispánicas.
Obra publicada:
Poesía: Ritual en piedra. Desnudo peregrino de mi boca. La arena de sus huellas. Cuento: De biznagas y otros nombres. Fotografía del cementerio judío de Praga. Novela: Plúmbago Polanco. Ensayo: Me mato por una mujer traidora; La pintura de Abraham Ángel.
Obra inédita:
Poesía: Pavana para dos infantes. Mi cuerpo germina temblor entre tus labios. Novela: Dama León.
Maestro y conferencista especializado en fenomenología y simbólica del pensamiento religioso, en mitología y en las áreas del pensamiento místico judío, cristiano, del islam, así como en el taoísmo, el budismo Zen y el budismo vajrayana o tibetano; en literatura medieval caballeresca del ciclo artúrico; en literatura fantástica; y en literatura latinoamericana, en particular, entre otros, en las obras de José Lezama Lima, Juan Carlos Onetti, Ernesto Sábato, José Revueltas, Amparo Dávila, Esther Seligson y Gloria Gervitz; también en la obra de Yasunari Kawabata.
En el Distrito Federal es catedrático de las materias Mitología y Religiones Primitivas, Seminario del sistema poético de José Lezama Lima, Literatura del Ciclo Artúrico, Metodología de la Investigación, Didáctica de la Historia del Arte, Seminario de Literatura Fantástica para el Instituto de Cultura Superior (1989-2014).
Para el Instituto Cultural Helénico A.C. (2000-2014) catedrático en la maestría Humanismo y Cultura, en el Diplomado y Curso Religiones del Mundo, y la Experiencia Mística. Catedrático en la Escuela Mexicana de Escritores en la materia La Construcción del Imaginario y el Sentido de la Ficción (2013-2014).
Conferencista en diversos foros sobre los temas: Mito y Poesía; Literatura Fantástica: de Lovecraft a Bradbury; Los Poetas Malditos; La Figura de la Diosa en la Literatura Caballeresca; La División del Cosmos en Femenino-Masculino; El Mito y Jaime Sabines; El Mito y Juan Rulfo; La Función del Héroe y el Cuento de Hadas; La Diosa, el Héroe y el Villano, del Poema de Gilgamesh al Código da Vinci; Ciclo de Conferencias titulado De la Batalla de los Dioses a la Tragedia de Edipo, entre otros.
Actualmente, junto con la soprano Aída Rivera de la Cabada presenta en diversos foros el espectáculo Poesía y Canto con el ensamble del mismo nombre.