Lo que le molestaba a Borges

1 junio, 2008

Hace casi 90 años, Jorge Luis Borges vivió en Mallorca. Vino a la isla balear acompañado por su familia: padre don Jorge Borges. Madre, doña Leonor Acevedo y hermana Norah. Llegaba procedente de Madrid y anteriormente habían estado en Andalucía. Sus amplios y profundos conocimientos maravillaron a un hombre culto e inteligente como Cansinos Asséns que lo elogió y le abrió paso para que entrara en las huestes ultraístas que eran las que movían, en  l920, al ambiente literario de la capital hispana. Cuando ese joven casi imberbe pisa tierra isleña no tiene ningún libro publicado pero sí algunos poemas sueltos aparecidos en revistas como “Grecia” , “Tableros” y otras. Y trae un valioso equipaje literario, sus conocimientos y prácticas vanguardistas que propaga entre los jóvenes poetas y escritores mallorquines.

     En Mallorca no sólo hizo grandes amistades sino que también publicó poemas, firmó un manifiesto ultraísta, mantuvo polémica con los detractores del ultraísmo y llevó una vida muy activa tanto diurna como nocturna. En abril de l921 los Borges ya se hallan en Buenos Aires y Jorge Luís igual que hizo en Mallorca lleva y difunde los estrepitosos cantos ultraístas por la capital argentina. Pero muy pronto ese tipo de entusiasmo se irá volatilizando. La aparición de su primer libro de poesía “Fervor de Buenos Aires”, abre camino hacia otro Borges. En l978 cuando alguien le comunica en Buenos Aires que en Mallorca se va a publicar un libro con una buena cantidad de poemas suyos escritos  en su juventud, brota la ira en él y pide que se consiga detener esa publicación. Pero no es un hombre de temperamento amargo, ni dado a represalias. Y esa ráfaga de cólera desaparece sin dejar huella.

   En 1981 Borges es invitado por el diario “Ultima Hora” de Palma de Mallorca, a visitar la tierra en la que pasó un año de su juventud. Llega a Mallorca acompañado de María Kodama, entonces su secretaria,  y entre los lugares a los que lo llevan sus oferentes está la deliciosa librería, por pequeña pero muy bien surtida de libros exclusivamente de poesía, llamada “Cavall Verd” y el dueño del local un poeta mallorquín de nombre Rafel Jaume, le obsequia el libro que el autor de estas líneas había publicado bajo el título de “Poesía juvenil de J.L.Borges” con un amplio estudio de los 18 poemas que contiene y una visión del paso de Borges por la isla.

   La reacción del maestro Jorge Luís es de antología. Pide a María Kodama que rompa el libro. Ella le responde que en la carátula hay una linda foto de él. Borges con su velocidad mental de siempre le responde que conserve la carátula y rompa lo demás. Llama la atención la contumacia del poeta por ocultar esos versos juveniles. ¿Temor a que empañen su obra posterior? ¿Rechazo a las tendencias ultraístas de los años veinte? Posiblemente hay algo de eso, pero por qué no mirar hacia algunos poemas con títulos como “Rusia”, “Guardia roja” “Trinchera”, que hacen pensar en un joven apasionado por la revolución bolchevique. Cómo aceptar algo que ya no encajaba en un pensamiento como el suyo muy modificado por el tiempo y el ambiente en que vivió desde 1921, año de su vuelta de Europa a la Argentina.       

Poemas de juventud de los cuales Borges se avergonzaba:

RUSIA

La trinchera avanzada es en la estepa un barco al abordaje con gallardetes de hurras
mediodías estallan en los ojos
bajo estandartes de silencio pasan las muchedumbres
y el sol crucificado en los ponientes
se pluraliza en la vocinglería de las torres del Kremlin.
El mar vendrá nadando a esos ejércitos
que envolverán sus torsos
en todas las praderas del continente.
En el cuerpo salvaje de un arco iris clavamos su gesta
bayonetas
que portan en la punta las mañanas.

Y he aquí ahora otro, inserto en la revista sucesora de Grecia, esto es, Ultra (Nº 3 Madrid, 20 de febrero de 1921):

TRINCHERA

Angustia.
En lo altísimo una montaña camina.
Hombres color de tierra naufragan en la grieta más baja.
El fatalismo unce las almas de aquéllos
que bañaron su pequeña esperanza en las piletas de la noche.
Las bayonetas sueñan con los entreveros nupciales.
El mundo se ha perdido y los ojos de los muertos lo buscan.
El silencio aúlla en los horizontes hundidos.

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Lima, 1930. Escritor y periodista peruano.

Ha vivido en Buenos Aires, Santiago de Chile, Barcelona, Madrid, París, Aix-en-Provence, Berlín y Palma de Mallorca; en Europa desde 1961, en Mallorca desde 1963.

Ha publicado veintiocho títulos, entre los que destacan las novelas La muchacha del bello tigre (Gijón, 1983), Bobby estuvo aquí (México, 1989; Lima, 2006), El amor según Toribia Ilusión (Barcelona, 1993), Huachos rojos (Lima, 1996 y 2005), A quién le importa el prójimo (México, 2000), Edén Moderno (Premio Ciudad de Valencia, 2003) y El héroe de Berlín (Lima, 2006); su libro de cuentos Seis y seis (México, 1980), y los ensayos Borges en Mallorca (Alicante, 1996), El primer Borges (Madrid, 2001), Tránsito de Oquendo de Amat (Las Palmas de Gran Canarias, 1972), Miguel Ángel Asturias, poeta (Gijón, 1975) y Rubén Darío en Mallorca (Palma de Mallorca, 1993).

Ha merecido el Premio Nacional de Teatro del Perú por La noticia (1958), el Premio Inca de Periodismo (Lima, 1959), el Ínsula de Poesía (Palma de Mallorca), el Periodismo Literario (Cádiz, l987), el Premio de Novela Ciudad de Valencia (2002) y el Ciudad de Peñíscola de Cuentos (2006).