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Vidaluz Meneses: Madre huérfana, ya no.

29 septiembre, 2016

María Roof

– Me tocó acompañar a mi amiga Vidaluz Meneses en uno de los momentos más dolorosos de su vida. La llamada telefónica la vulnerabilizó ante las profundas dudas que asuelan a muchas mujeres de su generación… ¿Habré sido buena madre? ¿Habré cumplido como madre? ¿Qué tipo de madre soy?


(1) Familia en Nicaragua, 1985: Hija Vidaluz, VLM, hijo Mariano, empleada Teresa Pérez e hijo Eddie, Tía Abuela Adelina.

En otra ocasión, durante las más de treinta horas de conversaciones que grabamos juntas y que luego constituyeron la introducción a Flame in the Air: Edición Bilingüe,Vidaluz explicó que se había apropiado de un verso de Rosario Castellanos para ilustrar sus sentimientos durante los 80s. Se hallaba en Managua sin ningún miembro de su familia y con una sola de sus cuatro hijos: “madre huérfana de prole”, abandonada, por un lado, por su padre (asesinado en 1979), por su madre y demás parientes autoexiliados en Nueva Orleans, y por el otro, por tres de sus cuatro hijos que optaron por salir del país y no vivir la revolución.

El poema justifica la acción de “La madre huérfana de prole. / La incendiaria que dinamitó su casa / construida sobre arena / para edificar sobre roca firme” (“Esa mujer”, 1989). Pero cuando le pregunté sobre la maternidad ni idealizada ni abstracta, sobre la mujer no heroína, tampoco la Pietà, sino la concreta e interdependiente intuida por la crítica Alba Fabiola Aragón en sus poesías, la respuesta reveló un torbellino de emociones encontradas: el orgullo de haber cumplido con las necesidades sociales del macroproceso revolucionario, mas también la vergüenza experimentada por su generación de mujeres de vanguardia, considerada, tal vez con razón, por hijos resentidos –como muchos de los vástagos de figuras públicas de ambos géneros dedicadas las 24/7 al servicio social y político– como “candil de la calle, oscuridad de su casa”.

Cuando en febrero de 2015 su hija Karla le comunicó su diagnóstico de cáncer de seno, ese cúmulo de viejas angustias volvió a clavarle en el corazón. Inmediatamente pensó suspender el viaje que habíamos emprendido, una gira de presentación de Flame in the Air comenzada en Washington, DC, y programada para las semanas siguientes en Pennsylvania, Ohio e Illinois, abandonar los trámites para asegurar residencia en Estados Unidos y así seguir cuidando a su madre y correr al lado de su primogénita en Managua. Pero Karla, la muchacha que se independizó de la casa siendo adolescente y se formó por su cuenta, pensaba que no la necesitaba…, decía tener suficiente apoyo de amigos y otros familiares y que su madre cumpliera con el compromiso profesional…, quizás después la necesitara más….

(7) Gira Febrero 2015 en la University of Cincinnati, Cincinnati, Ohio: María y VLM con los profesores Nicasio Urbina y Carlos M. Gutiérrez (Chair, Departamento de Romance Languages and Literatures).

(7) Gira Febrero 2015 en la University of Cincinnati, Cincinnati, Ohio: María y VLM con los profesores Nicasio Urbina y Carlos M. Gutiérrez (Chair, Departamento de Romance Languages and Literatures).

Hablamos largamente. Abatida, preocupada, la poeta examinó su conciencia y sus opciones, oró y consultó con su gran amiga y compañera generacional, Ángela Saballos, quien la animó a reconocer la inesperada oportunidad de profundizar lazos con la hija. Con su acostumbrada integridad y eficiencia Vidaluz decidió continuar la gira, presentó peticiones para no perder el proceso de residencia y poco después volvió a Nicaragua.

El karma universal de cosechar lo que se siembra se materializó en casa para Vidaluz Meneses con la segunda oportunidad de ser madre, invitada ya por su hija, como la sobreviviente Karla Icaza Meneses reconoce agradecida en la sección “Mi mamá, mi ángel” de su magnífico testimonio, Mi experiencia con el cáncer de seno: el poder del amor (2015):

Vidaluz Meneses y su hija Karla Icaza,

Yo he sido muy independiente toda mi vida y como me fui a vivir sin mis padres a los catorce años “desaprendí” lo que significaba ser hija. Pero esta circunstancia en la que a mi mamá le tocó darme de comer en la boca, limpiarme cuando iba al baño, prepararme la comida, lavar mi ropa, arreglar mi cama, etc., tareas que tuvo que hacer en algunos momentos mientras estuve en la terapia, porque mis energías no me lo permitían o, porque sencillamente ella misma quería hacerlo, permitió un acercamiento entre las dos que ha sido una bendición.

Por el lado de ella, yo sé y lo sentí en todo momento, que el tener la oportunidad de hacer todas esas cosas por mí le dio mucha paz y satisfacción, como si hubiera recuperado el tiempo perdido. No tengo palabras para agradecerle a mi mamá todo lo que hizo por mí durante esta prueba. Descubrí una fortaleza que no sabía que tenía; una paz y una calma que solo Dios se la pudo dar. Hasta los malestares de la pierna se le aminoraron; su presión se mantuvo estable, bajó de peso por estar comiendo mi comida sana y eso le ayudó muchísimo y sé que creció espiritualmente, posiblemente como nunca antes en su vida.

La transformación se completó apenas año y medio después cuando Karla logró comunicarle que “le agradecía a Dios el habernos dado tiempo para reencontrarnos, para ‘reconstruir nuestro puente de palabras’; para ponernos al día por el tiempo que no tuvimos cuando yo me fui de Nicaragua”. Vidaluz vivió varias semanas rodeada de sus cuatro hijos, todos atendiéndola y sacrificando sus propios deberes profesionales, hasta tomar su último suspiro abrazada de ellos el 27 de julio de 2016, madre ya no huérfana.

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(2) VLM: últimos días con sus 4 hijos: Mariano, Carlos, Karla, Vidaluz. Julio 2016.


 

Poemas
Selección y traducción de María Roof


Llama guardada (1975)

He visto

He visto en tu ojo
la muerte redonda aproximarse.
¡Ah ribera de sombra
que encauza mi agonía en esta hora!

Quiero morir de espaldas a la noche
para que el cielo siembre su cosecha de estrellas
en mi dorso desnudo.

He mojado con mi llanto
la camisa ensangrentada
de los muertos en Viet Nam
y el dolor de las bombas que mi era engendró
para desintegrar el cosmos.

Pequeña es al fin y al cabo mi melancolía
ante el dolor supremo de mi gran hermandad.

Por eso es esta muerte poco a poco
como una bomba de tiempo
que no llega a estallar.

1974

I Have Seen

I have seen in your eye
the circle of death approaching.
Oh, river bank of shadow that
channels my agony at this hour!

I want to die turned from the night
so the sky can sow its starry harvest
on my naked back.

My tears have soaked
the blood-stained shirts
of the Vietnam  dead
and the pain of bombs
birthed by my era
to disintegrate the cosmos.

Small, in the end, is my melancholy
alongside the supreme suffering
of my great human family.

That’s why this slow death is
like a time bomb
not yet exploding.

1974

Yo amanezco persiguiendo un canto

El día se tiene que resolver
y yo amanezco persiguiendo un canto.
La humedad de hoy no me sugiere
precisamente “Dry Cleaning”.
La grama no clama por su corte periódico
sino por mis pies hundidos en ella.

El patio me llama en el mango enano,
en la caña, en el plátano,
y en el incipiente heliotropo
que ya asoma.

Hoy no será el lienzo
en los vidrios empolvados
sino la promesa de liberación
que es una ventana.

Un avión atraviesa las nubes
con la vertiginosa potencia de su máquina
pero ya antes los pájaros
tomaron posesión del cielo.

No escucharé la radio que me recuerda
el tiempo de los relojes,
haré mi día sin horas
porque hay que resolverlo todo
y he salido temprano en busca de un canto.

1971

I Awake Chasing A Song

The day must be organized
and I awake chasing a song.
Today’s humidity doesn’t suggest
“Dry Cleaning” exactly.
The lawn clamors not for its regular trim
but for my feet sunken in it.

The patio calls to me in the dwarf mango tree,
in sugar cane and plantain,
in the budding heliotrope
already peeping out.

Today there will be no rag upon
dusty panes,
but the promise of liberation
that is a window.

A plane pierces clouds,
with its engines’ vertiginous power,
but earlier, birds had
already claimed the sky.

I’ll not listen to the radio
reminding me of clock time,
I’ll make my day without hours
because everything must be organized,
and I left early in search of a song.

1971

 


El aire que me llama (1982)

Mayo Nicaragua

Mayo significó hace tiempo
mi debut en el mundo,
rojas primaveras florecieron
en los cercos de Matagalpa,
El Jícaro y Ocotal.
Atrás había quedado
la umbrosa selva de Bonanza,
paradisíaco mundo infantil.

Muchas lluvias han lavado
desde entonces el recuerdo.
Cada vez más escasa, el agua,
como marea que se retira para siempre,
desnuda la aridez de arena y rocas.
Busco en la ligera brisa,
lluvia tímida de este mayo,
un principio de vida
para esta madre que se nos muere
—sangre por los cuatro costados—
Muerte de madre en cruz,
madero florecido en mayo.

1978

May in Nicaragua

May used to mean
my debut in the world,
red primroses flowered
in the gardens of Matagalpa,
El Jícaro and Ocotal.
Left behind was the
dark rain forest of Bonanza,
heavenly childhood world.

Many rains have since washed
the memory.
Ever more scarce, the water,
like a tide ebbing forever,
reveals the aridness of sand and rocks.
I search in the gentle breeze,
for this May’s timid rains,
a beginning of life
for this, our dying mother
—blood in all four sides—
mother’s death on a cross,
wood flowering in May.

1978

Mujer cachikel

I

He palpado los surcos de los siglos
en tus mejillas, mujer cachikel.
La desconfiada ceremonia
comercial del regateo,
tu impasible posición de tejedora,
Gandhianas rodillas contra el suelo
y las manos como rápidas ardillas
entrecruzando los hilos del mantel,
del delantal o la alfombra
que hablarán de vos,
morena Penélope, en otras latitudes.

II

Silente compañera que tejiste los cabellos del amado
bajo la luna que aullando
quisieron atrapar los viejos lobos.
Vientre preñado que abortó rubios hijos de conquistadores.
Diligente sombra-símbolo,
tradición hecha mujer.

1978

Cakchiquel Woman

I

I have touched the furrows of centuries
in your cheeks, Cakchiquel woman.
The distrustful business ceremony
of bargaining,
your impassive weaver pose,
Gandhian knees against the ground
and your hands like swift squirrels
weaving the threads of a tablecloth,
apron or rug
that will speak of you,
dark Penelope, in other latitudes.

II

Silent partner, you wove the hair of your lover
under the moon that ancient wolves howling
tried to trap.
Pregnant belly that aborted blond children of conquistadors.
Diligent shadow-symbol,
tradition made woman.

1978

 


 Llama en el aire (1990)

Eva de siempre

Virgen es la dueña
de su propio cuerpo.
(Sabiduría antigua)
o en otras palabras:
El hombre propone
y la mujer dispone
(Refrán popular)

Sucede que en una de esas vueltas que da la vida
te convertís en don apetecido.

De pronto te empiezan a descubrir
una bella cabeza de Nefertiti egipcia o de Coré griega.

Gustan de tu sonrisa
o de tu forma de hablar
entre ponderada y profana.

Se trata también de que perciben
tu cuerpo y lo que en él destaca.

Sabido esto advertirás a tiempo
la intención de quien te acecha,
dueña y señora de tu libertad
que define el día y la hora, o nunca.

1987

Forever Eve

The virgin is mistress
of her own body.
(Ancient wisdom)
or in other words:
Man proposes,
woman disposes.
(Popular saying)

It happens that in one of life’s twists and turns
you become a desired gift.

Suddenly, they begin to discover
your beautiful head of Egyptian Nefertiti or Greek Cora.

They love your smile
or the way you talk,
between profound and profane.

They begin to notice too
your body and all its wondrous parts.

Knowing this, you will perceive in time
your pursuer’s intentions,
you, mistress of your freedom,
who decides the day and the time, or never

1987

Poeta o ángel terrible

A mis hermanos poetas

Tener un poeta en la casa
es cosa terrible.
Todo lo pone de cabeza.
Saca la vida familiar a la calle,
le da sonido al silencio,
habla con la boca cerrada,
los detalles no le pasan inadvertidos
sino que los agiganta;
dialoga directo con los muertos
y con el inconsciente de los vivos,
desata el nudo de la realidad
tejida con imaginación.

Pone las estrellas de cielo raso
e ilumina la casa con la luna llena,
acelera el ritmo lento de los mayores
y aquieta a niños y adolescentes.

Cuando está ya se ha ido
Y cuando se va aún permanece.

Es terrible como los ángeles de Rilke
con todo y el olor de santidad
con que impregna lo que toca,
convencido de que lo carnal
es sobrenatural.

1987

Poet, or Terrible Angel

To my fellow poets

Having a poet in the house
is a terrible thing.
He stands everything on its head.
Puts family life out on the street,
turns silence into sound,
speaks with his mouth closed,
details don’t go unnoticed,
rather he exaggerates them;
he speaks directly with the dead
and with the subconscious of the living,
unties the knot of reality
woven with imagination.

He sets stars in the open air
and lights the house with a full moon,
hurries the slow rhythm of elders
and calms children and adolescents.

When he’s present, he’s already gone
and when he leaves, he yet remains.

He is terrible like Rilke’s angels
with all this and the odor of sanctity
that pervades all he touches,
convinced that the carnal
is supernatural.

1987

Esa mujer

A Rosario Castellanos

Esa mujer que ha desviado la mirada
del pájaro en la ventana
para atender el doblez uniforme
de sábanas y manteles
y levantar impecables hileras
de ropa planchada guardada con naftalina,
tuvo el sobresalto de inexperta primeriza
verificando el peso de la criatura
antes y después de amamantarla
dudosa de la fuerza de sus pequeños pechos
de su frágil humanidad expuesta al parto
cuando aún no se había terminado de parir a sí misma.

La madre huérfana de prole.
La incendiaria que dinamitó su casa
construida sobre arena
para edificar sobre roca firme.

La que supo dar brazos y manos extendidos
desde el fondo de los siglos
y no preguntó sino que confió.

Esa mujer que avanza iluminada
bajo el sol de su terca certidumbre
la agónica, la siempreviva,
la que muere y renace cada mañana
arrebatada en la cauda luminosa de un astro.

1989

That Woman

To Rosario Castellano

That woman who turned her glance
from the bird at the window
to attend the uniform folding
of sheets and tablecloths
and lift impeccable stacks
of ironed clothes stored in mothballs,
was frightened by her inexperience as a new mother,
verifying the weight of her infant
before and after nursing,
doubtful of the power of her small breasts,
of her fragile humanity exposed to childbirth
when she had not yet finished birthing herself.

The mother orphaned of offspring.
The incendiary who dynamited her house
built on sand
to reconstruct on solid rock.

She who extended arms and hands
from the depths of the centuries,
and questioned not but trusted.

That woman who advances enlightened
under the sun of her obstinate certainty,
the suffering, the ever-alive,
who dies and is reborn each morning,
caught in the brilliant wake of a star.

1989

Muro de lamentaciones

Esta vez no ahogaré la memoria,
asumiré los muertos y la separación de los amantes
que es otra forma de morir.
No deambularé esquizofrénica por el mundo
sino con el estandarte del holocausto vivido,
no ahogaré sus voces que claman por el reino que
no hemos podido construir,
no ignoraré la sangre en el barro,
el alarido del fondo de las entrañas,
el rugido de la multitud acumulado en el pecho,
la furia de los impotentes,
el mal gusto de gritar en una calle contra las
impecables paredes,
la punzada directa en el corazón
al detenernos en un semáforo.
No pondré diques al llanto
ni pesaré las palabras en el fiel de la balanza
—la mediocrita áurea hecha trizas,
la mesura apartada por inútil—
sin tributos ni mayores concesiones a la vida.
Hay un tiempo de llorar que debe ser cumplido
hasta el hundimiento total, Valle de lágrimas,
Muro de lamentaciones,
rasgadura de velos para que salga el ánima
y se exponga en la piedra de sacrificio,
hora en que el náufrago suelte su asidero de vida,
hora del despliegue de la orfandad ante el final
más allá de lo visto y vivido, más allá.

1990

Wailing Wall

This time I’ll not stifle memory,
I will claim the dead and the separation of lovers
which is another form of death.
I’ll not wander the world schizophrenic
but with the banner of the holocaust lived,
I’ll not stifle their voices clamoring for the kingdom
we were unable to build,
I’ll not ignore the blood in the dirt,
the scream from the bottom of the gut,
the masses’ roar packed into the chest,
the fury of the powerless,
the discarded scream in a street against
spotless walls,
the direct stab in the heart
as we stop at a traffic light.
I’ll not dam this flood of tears
nor weigh words in the balance scale
—golden mean smashed to bits,
restraint abandoned as useless—
no tributes or great concessions to life.
There is a time to weep that must be fulfilled
to the utter depths, Valley of Tears,
Wailing Wall,
rending of veils, so the soul can appear
and offer itself on the sacrificial stone,
hour for the shipwrecked to loosen his hold on life,
hour for unfurling orphanhood given the end
beyond all we have seen and lived, far beyond.

1990

 


Todo es igual y distinto (Poemas 1992-2001)

Viaje hacia el interior

He iniciado el viaje al centro de mí misma,
el necesario retorno a las cosas elementales:
un río y su lecho de piedras blancas y pulidas,
flores silvestres —copa de miel para las mariposas—
y atardeceres aturdidos por las chicharras.

Busco la fuente primigenia,
la materia acuosa en la que me formé,
la silenciosa y plácida cavidad
donde mis células se reprodujeron
con la magnificencia galáctica del Big Bang.

Indago por ese origen de vida,
de donde ya han emergido hijos de mis hijas
el misterio desplazándose sobre las aguas,
las partículas vivas y dispersas
apareciendo y desapareciendo.

—Tanto afán por ordenar el caos!
—y si decido quedarme quieta
como una tabla de surf, suelta,
sobre el vaivén de las olas?

Mayo 1998

Journey toward the Interior

I have begun the journey to the center of myself,
the necessary return to elemental things:
a river and its bed of smooth, white stones,
wildflowers —cup of honey for butterflies—
and afternoons buzzing with cicadas.

I seek the primary fountain,
the aqueous material in which I was formed,
the silent, placid cavity
where my cells were reproduced
with the galactic magnificence of the Big Bang.

I search for that origin of life,
from which children of my daughters already have emerged,
the mystery spreading out over the waters,
the live, disperse particles
appearing and disappearing.

—Such desire to order the chaos!
And what if I decide to stay quiet
like a surfboard loose
on the ebb and flow of the waves?

May 1998



Publicado en Karla Icaza Meneses, 
Mi experiencia con el cáncer de seno:
el poder del amor
(2015).

Cuaresma 2015

Abril, el más cruel entre los meses,
Hace que nazcan lilas en la tierra muerta…
–T.S. Eliot, La tierra baldía

Para mí fue marzo cuando no esperaba
ese golpe bajo, esa profecía no asumida
-la herida de mi primogénita-
La que Vos sacaste de mi vientre
y me hiciste entregártela confiada
porque la habías cuidado desde antes de nacer
para que yo fuera libre de servirte
y de ir donde me necesitaras.
La he visto batallar desde su fragilidad de lirio
Buscar tu Voz en el silencio de la madrugada
Tu Luz en la penumbra de los anocheceres.
Todavía no me repongo del dolor y el asombro
en esta travesía para rescatar su vida.
¡Que hasta allí tu misericordia alcance, Señor!

Abril 2015

Lent 2015

April is the cruellest month, breeding
Lilacs out of the dead land…
–T.S. Eliot, The Waste Land

For me, it was March when I expected
no such low blow, the prophesy unheeded
—injury to my firstborn, a daughter—
the one You drew from my womb
and made me entrust her to You with confidence
because You had cared for her before birth
so that I was free to serve You
and go where You might need me.
I have seen her do battle, tho fragile as a lily,
seek Your voice in the silence of dawn
Your light in the shadows of nightfall.
I am unrecovered yet from the pain and fright
in these impassioned efforts to save her.
May Your mercy reach so far, Oh Lord!

April 2015

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