Un viaje de múltiples paradas

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Cuando a esta revista le toca descubrir a nuevos valores siempre queda la sensación de haber cumplido una noble tarea. Ahora mismo estamos de plácemes luego de reconocer como ganador al guatemalteco Carlos Roberto Calderón del Cid en la XI edición del Premio Centroamericano de Cuento Carátula, recién entregado en el marco del más reciente festival Centroamérica Cuenta. Su texto “Parranda Perpetua”, incluido en esta edición, fue el elegido de entre 121 relatos recibidos de jóvenes de toda Centroamérica. El jurado, compuesto por los escritores Sergio Ramírez, Claudia Piñeiro, Emiliano Monge y Daniel Centeno Maldonado también reconoció dos piezas adicionales: “La condición humana y otros asuntos menores”, de Fátima Alejandra Villalta Chavarría y “La parte aérea”, de Enrique Delgadillo Lacayo. Ambos autores, oriundos de Nicaragua, compitieron con sendas piezas que también merecieron figurar en la presente edición veraniega de esta revista.

Si lo anterior fue una buena noticia, hay que resaltar que este trío de jóvenes no está solo. Carátula es una caseta de teleférico donde cabe todo el mundo. En el campo de la creación no nos quedamos cortos. Sólo en poesía contamos con una batería de versos mexicanos, groenladeses, dominicanos, nicaragüenses y costarricenses. ¿Sus autores? Orlando Mondragón, Soledad Álvarez, Naja-Marie, Andrés Cisneros, Gloria Gabuardi y Shirley Campbell Barr. Los acompañan dos narradores europeos de alto nivel: Pol Popovic Karic y el admirado Enrique Vila-Matas. Casi nada…

Pensemos en un cable infinito que nos lleva de una estación mejor a otra insuperable. En crítica Margo Glantz nos sorprende con su ensayo “Los hijos de Pedro Páramo”. No siempre se tiene la oportunidad de leer lo que piensa una grande de un inmortal. Las palabras sobran… Fer de la Cruz brilla en un artículo académico sobre dos poetas mayas, Álvaro Rojas Salazar nos regala una buena reseña sobre el último libro publicado por Sergio Ramírez, Jesús Abraham G. Hernández nos comenta su lectura sobre «Mariposa negra» de Mónica Mateos y Santiago Montobbio comparte lo que le provoca la lectura del escritor Pedro Salinas. La nota curiosa la pone el joven filósofo Jorge Antolín. Éste nos obsequia el primer capítulo de su libro Néstor Sánchez, la conducta iluminada, la biografía de acaso el más maldito y desconcertante escritor argentino que haya existido. Imposible no quedar intrigado.

En lo más alto de la montaña aparecen dos estaciones inesperadas. La primera con forma de reportaje del polaco Artur Domosławski.  Quien fuera uno de los pupilos más aventajados de Ryszard Kapuściński entra a los núcleos de las favelas más peligrosas de Rio de Janeiro, y nos presenta un desnudo frontal capaz de revelar todas sus impudicias. La última estación es la de nuestro amigo Alfredo Padrón. En una extraña, no por eso menos próxima, crónica/entrevista con Mircea Cărtărescu este fotógrafo venezolano entrelaza recuerdos de su juventud en Rumania mientras discute con este poeta asuntos que saltan desde la política hasta el compromiso de la creación. Aún no repuestos de la lectura, sabemos que habrá que cambiar de caseta, y volver a este viaje de muchas idas que siempre nos depara el pensamiento y sus múltiples descubrimientos por vía de la escritura.

Daniel Centeno Maldonado